Pasamos un mes desde la desaparición física del Cro. y conductor Néstor Kirchner.
Mirando sobre el hombro vemos una oposición atomizada, embarrada hasta el cuello, resentida y en picada, ganando solo el descreimiento de sus cada vez menos seguidores.
Tal vez especularon con que Cristina, aprovechando la coyuntura extremadamente favorable, adelante las elecciones. Pues no, y con todos los indicadores en verde esperanza, nos vamos acercando a un 2011 bisagra, un año para profundizar el modelo, un año de justicia social, un año peronista.
De solo imaginar como van a sufrir este 2011, "no para de reirme" (parafraseando a la Gioconda pintada por Botero). Los que lleguen, lo harán con la lengua afuera. Vamos a jubilar a muchos. Es ahora compañeros! A cerrar filas y a empujar juntos para adelante. HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.